Patti

Dettaglio

Un cofre que guarda tesoros de inmenso valor, de los cuales Tíndari es quizás la gema más preciada. Patti es uno de los principales centros turísticos de la provincia de Messina. Forma parte de la vasta zona de los Nebrodi y se asoma a las plácidas aguas del Tirreno del golfo del mismo nombre. Además de ser la sede histórica de numerosas instituciones, también es un importante centro religioso, el obispado de la Diócesis de Patti, una de las más antiguas de Sicilia  y el famoso Santuario de Tíndari.

El centro de la ciudad de Patti antigua,  planta medieval, estuvo separado de la zona conocida como Marina de Patti (Patti Marina) con la cual hoy es solo uno, como resultado de la expansión progresiva de la ciudad.

El prestigio de este territorio está a la altura de la riqueza arqueológica y naturalista que ofrece.

El centro histórico ha mantenido intacto el tejido medieval. Callejones, escalinatas, iglesias, adornadas con flores, lo convierten en un lugar sorprendente. Paseando por sus calles es posible toparse con bellos edificios religiosos, iglesias bien conservadas y elegantes edificios del siglo XIX. El pueblo aún conserva algunas partes de las antiguas murallas de la ciudad, que datan del siglo XIV.

El principal edificio religioso de Patti es la Basílica Catedral de San Bartolomeo, construida en el 1094 a instancias del Gran Conde Roger I de Altavilla. En el interior de la Catedral se encuentra el sarcófago de la Reina Adelasia, esposa del Gran Conde. La Basílica se alza junto al palacio episcopal y su fachada de estilo gótico se caracteriza por la presencia de piezas negras de origen lávico que le dan un toque verdaderamente original. Alberga un hermoso altar adornado con una pintura de la Adoración de los Pastores, atribuida al pintor flamenco Guglielmo Borremans.

Para descubrir dónde se encuentran las raíces de la ciudad de Patti, basta  levantar la vista hacia el promontorio sobre el que se alza la antigua ciudad de Tyndaris, fundada en el siglo IV a.C. por el tirano siracusano Dionisio el Viejo, al final de la primera Guerra Púnica. Aquí uno se siente pequeño ante la presencia del imponente Santuario que alberga a la Virgen negra, en madera de cedro, pero aún más ante la presencia de la historia. Visitando el yacimiento homónimo del Parque Arqueológico de Tíndari, es imposible no quedar encantado con el Teatro Greco-Romano, bien conservado e inmerso en el matorral mediterráneo, escenario de eventos culturales de renombre internacional.

La mejor vista que abarca el Golfo de Patti, las Islas Eolias y Capo Milazzo, se puede disfrutar caminando por el sendero Cola de Volpe, una ruta de trekking de dificultad media (debido a las pendientes) muy apreciada por los excursionistas.

A los pies de Capo Tíndari, la Reserva Natural Orientada de los Lagos de Marinello ofrece un sorprendente rincón de paraíso. Aquí reina una naturaleza incontaminada y salvaje con un paisaje abigarrado que va desde la lengua arenosa de la playa de Marinello, con su forma muy particular, hasta las Cuevas de Mongiove, entre arcos naturales y pilas que dan a la costa un encanto arcano.

La ciudad puede contar con otro importante bien cultural que salió a la luz durante las excavaciones para la construcción de la autopista Palermo-Messina. Es una espléndida villa romana tardoantigua del siglo IV. A.D., rica en mosaicos policromados de considerable tamaño que tienen afinidades, en composición y tipo, con el estilo africano, característica que une la Villa a las del Casale en Plaza Armerina y del Tellaro, cerca de Noto. Esta última parada imperdible en los Parques Arqueológicos de Siracusa.

Patti ofrece más de diez kilómetros de playa bañada por aguas turquesas, amplias y en su mayoría libres, perfectas para bucear y observar los hermosos fondos. De hecho, es un meta tirrénica muy codiciada para explorar en apnea,  practicando snorkel y submarinismo. La Seca del Tíndari es uno de los bajíos más conocidos y buscados por buceadores experimentados. El “Escollo de Patti”, también conocido como «a petra i patti«, ofrece un fondal muy interesante formado por numerosas rocas y barrancos colocados sobre un fondo rocoso y que dan cobijo a una increíble variedad de peces. En fin, el  escolleto  ofrece encuentros extraordinarios con numerosas especies pelágicas del Mediterráneo.

La Marina de Patti es el corazón de la vida nocturna. En verano, parada obligada, antes de bajar a la playa, en uno de los numerosos lugares del paseo marítimo, para el ritual del desayuno con granizado y brioche; o, después de un día de playa, para disfrutar del happy hour al atardecer, con el sal todavía en la piel. Subiendo desde el paseo marítimo hacia Via Mustazzo, es posible visitar la Villa Pisani.

Los amantes de los campamentos estarán felices de saber que es posible estacionar en autocaravanas en las cercanías.

Concluimos el city tour con una tentadora y deliciosa experiencia: solo aquí, en las principales pastelerías de la ciudad, podrás degustar las empanadas de carne, un dulce con forma redondeada, que junto a las almendras tostadas, tienen un ingrediente poco común: ¡carne de ternera!

Pero en esta zona la tradición enogastronómica cuenta con muchas otras excelencias: Mamertino (entre los vinos DOC de Sicilia) y el aceite de oliva «Valdemone«, una de las variedades de aceite DOP sicilianas.

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